Los canadienses y los estadounidenses no están entusiasmados con los autos eléctricos

Los canadienses y los estadounidenses no están entusiasmados con los autos eléctricos

Según encuestas recientes, la mayoría de los canadienses parecen estar poco interesados en comprar un automóvil eléctrico. De hecho, estas encuestas, que se llevaron a cabo el mes pasado con una muestra de 1,000 consumidores, revelaron que el 95% de ellos no planea comprar un automóvil eléctrico cuando tienen que cambiar su vehículo. Sin embargo, casi 4/10 de ellos declararon que estaban listos para tener en cuenta las características de un vehículo eléctrico cuando tuvieron que decidir, pero casi la mitad dijo que la compra de un automóvil eléctrico no les interesaba. Está claro que el argumento ecológico no parece haber convencido completamente a los automovilistas canadienses.

Por otro lado, parece que debe realizarse un esfuerzo de comunicación sobre la fiabilidad técnica del modo de propulsión eléctrica. De hecho, las personas temen los problemas técnicos y la imposibilidad de remediar una posible falla eléctrica. Casi la mitad de los encuestados cree que un automóvil eléctrico no tiene la confiabilidad de un automóvil con un motor de combustión interna. Sin embargo, la gente espera que la tecnología avance, ya que casi el 90% de ellos cree que la confiabilidad de los autos eléctricos mejorará dentro de cinco años.

Además, los fabricantes de automóviles eléctricos no han dejado en claro que un automóvil eléctrico puede ser más económico que un automóvil de gasolina. De hecho, más de la mitad de los encuestados piensa que usar un automóvil eléctrico es más costoso que usar un automóvil de gasolina. Sin embargo, para conocer el costo real de usar un automóvil eléctrico, por supuesto es necesario tener en cuenta la depreciación del vehículo, pero también su consumo de energía.

Los estadounidenses tampoco parecen estar convencidos por el automóvil eléctrico. De hecho, una encuesta realizada en los Estados Unidos reveló que dos tercios de los encuestados mostraron poco o ningún interés en esta categoría de automóviles. Esta reticencia se explica en gran medida por una autonomía que a menudo se considera insuficiente. Además, dado que estos automóviles son más caros de comprar que los automóviles de gasolina con la misma potencia, su precio constituye una desventaja adicional. Por otro lado, los estadounidenses parecen tener los mismos prejuicios que los canadienses sobre la confiabilidad técnica de los automóviles eléctricos. De hecho, más del 33% piensa que las baterías pueden ser peligrosas y el 40% teme las fallas eléctricas.