campeón defensor de vehículos eléctricos

Con una población estimada de 5,2 millones de personas, Noruega es hoy el país con el mayor número de automóviles eléctricos en sus carreteras. Se vendieron 24.222 vehículos eléctricos nuevos en el país en 2016, o el 16% del total de vehículos comprados, una hazaña mundial.

Los sectores eléctricos e híbridos en auge

Noruega es hoy el país con el mayor número de vehículos eléctricos en proporción a su población. Con 24,222 copias de automóviles vendidos en 2016, el país establece un récord real en la escena internacional. Esta cifra representa el 16% de la cuota de mercado total. Con los 20,063 autos híbridos recargables vendidos en el mismo año, la cuota de mercado cae al 29%, una cifra significativa. Desde principios de año, el sector híbrido ha seguido creciendo en fuerza, gracias a la comercialización de nuevos modelos prácticos como los vagones de estación, muy populares entre las familias en Noruega.

Beneficios que seducen enormemente

Este deslumbrante éxito de la electricidad, el país se lo debe a los muchos beneficios que disfrutan los usuarios. Además de beneficiarse de unos 1.200 espacios de estacionamiento gratuitos, los usuarios de vehículos eléctricos pueden cruzar los peajes instalados en los ejes principales que conducen a las principales ciudades del reino, incluido Oslo, de forma gratuita. Al comprar, los modelos eléctricos también están exentos del IVA. Una verdadera bendición para los propietarios, especialmente en uno de los países donde el costo de vida se encuentra entre los más altos de Europa. Además, los vehículos totalmente eléctricos pueden moverse libremente en los pasillos de los autobuses, tanto dentro como fuera de Oslo.

Soluciones bien encontradas

Si el país va a ser hoy campeón de los vehículos eléctricos, es sin duda gracias a los incentivos públicos que el gobierno ha facultado para implementar. Y en este punto, es la exención del IVA la que marca la diferencia. La secretaria general de la Asociación Noruega de Coches Eléctricos lo dijo, sin esta ayuda, simplemente habría sido impensable, si no imposible, atraer a los usuarios a una tecnología incierta, con autonomía reducida y cuya infraestructura para recargar sigue siendo imperfecta.